Tal vez me he preguntado si en medio de la crisis que tenemos, al ver tanto sufrimiento y maldad en el mundo, aun existan los valores morales, es que al hacernos un análisis nos damos cuenta que estamos en una crisis de valores o principios que por años nos han ayudado a crecer como personas, muchos de los morales practicados desde la antigüedad en la época de los filósofos y que eran clave en el desarrollo del estilo de vida de las personas, se han perdido y la pregunta es ¿Por qué? Será que hemos perdido interés por ellos, tal vez la inmoralidad como una normalidad y aquellos que todavía practican estos valores entonces nos convertimos en los extraños, en lo anormales por no dejar a un lado los principios que nos enseñaron en la primera escuela que es la familia.

Y es que la crisis que vivimos no nos deja avanzar, se presentan tantos obstáculos que impiden que la crisis de esos fundamentos importantes se acabe; será que nos falta sentido, que, igual que un barco vamos de aquí a allá, a la deriva de las aguas y del viento, es que el egoísmo, el individualismo no nos permite realizar proyectos en grupo, trabajar como una familia, formar un equipo.

Este es un llamado a preguntarnos qué es lo que está pasando en nuestro mundo y cómo podemos ayudar a implementar más los valores en nuestra sociedad y en nuestras familias.